Servicios Koinonía    Koinonia    Vd esta aquí: Koinonía> Páginas neobíblicas > 004
 

 

La Torre de Babel

Jorge Pablo BRUGNONI


 

Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. El amo decía, tirando un mendrugo: "es éste el precio justo" y el súbdito arrodillado callaba. Acumular lo que sobra de quienes adolecen. Idolatría de mercaderes profetas. Toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras.

Y se dijeron unos a otros, los pocos con voz: "Vamos, hagamos muros, dinamita, misiles, explosiones." Y les sirvió la bomba en lugar del pan, y el miedo en lugar del amor.

Y dijeron: "Vamos, edifiquemos una feria grande como el mundo con una antorcha de acero que llegue hasta el cielo; reinará el fuego nuestro, ocultando la luz con reflejo de metales; así nos haremos famosos y no andaremos desparramados por el mundo. Seremos un solo nombre: el nombre del Dinero que nos nace."

Yavé bajó para ver la feria y la antorcha que los seres humanos estaban levantando y dijo: "Veo que todos forman una gran feria y hablan una misma lengua, siendo esto el principio de su obra. Ajenos a mí, ajenos a ellos, solitarios en el bullicio, conviven con la miseria y la opulencia, los condenadores y los condenados, sin que su corazón se subleve ni resienta. Ahora nada les impedirá que consigan todo lo que se propongan.

Pues bien, bajemos, y una vez allí cerremos sus ojos enceguecidos. Para mirar hacia dentro. Que cada uno hable su palabra, que es la de su abuelo, su madre, sus nietos. Que nazcan de nuevo en su lengua. No se entenderán unos a otros cuando enmudezca el nombre del Dinero. La antorcha de acero, la gran feria, el alto fuego, las etiquetas que sellan -infames- lo que es de todos, se desvanecerán".

Así Yavé los dispersó sobre la superficie de la tierra y dejaron de construir la Gran Aldea. Únicos, nuevos, nacieron los hijos de los seres humanos. Y tímidos y tanteando recordaron lo que es rozarse, tocarse, sentirse, abrazarse y abrir sus ojos a la luz por primera vez. Así se reconocieron hermanos. Por eso se llamó Babel, porque allí Yavé confundió el lenguaje de todos los habitantes de la tierra.

 
Jorge Pablo Brugnoni
Uruguayo en Paraguay

 


 



  Portal Koinonia | Bíblico | Páginas Neobíblicas | El Evangelio de cada día | Calendario litúrgico | Pag. de Cerezo
RELaT | LOGOS | Biblioteca | Información | Martirologio Latinoamericano | Página de Mons. Romero | Posters | Galería
Página de Casaldáliga | La columna de Boff | Agenda Latinoamericana | Cuentos cortos latinoamericanos